Viaja por toda Europa de una manera diferente: haciendo senderismo organizado

Están cambiando las preferencias de las personas a la hora de viajar. Cada vez los turistas optan por excursiones de naturaleza donde practicar senderismo. No es que se haya dejado de lado al turismo de ciudad, sino que el público está más repartido. Tanto es así que, en los últimos años, están surgiendo muchas empresas de viajes de senderismo organizados por toda Europa, como Orbis Ways.

Desde luego que para los principiantes es un alivio encontrar profesionales cualificados en esta materia los cuales puedan informarte de manera generalizada sobre aspectos como la obtención de permisos para ir por algunas zonas, condiciones climatológicas, las rutas que se pueden hacer, etc.

¿Qué tienes que saber antes de hacer senderismo?

No es lo mismo hacer senderismo que hacer trekking. El primero se refiere a caminar por senderos señalizados y la ruta no dura más de un día. Y el segundo, los caminos no están señalizados y puedes hacerlo en varios días o etapas. Sea a cual sea tu elección, hay cosas que debes saber antes de ponerte en marcha.

Si eres principiante, deberás entrenarte de forma gradual para no sufrir lesiones ya que tu cuerpo no está acostumbrado a trabajar de una manera tan intensa y puedes sufrir daños. Del mismo modo, debes evitar ponerte zapatos nuevos. El pie no se ha adaptado a ese calzado, por lo que pueden dolerte y salirte ampollas.

Si tienes pensado recorrer una ruta que tenga subidas, debes hacer el ascenso con pasos cortos a un ritmo constante. No vayas a acelerar el paso para llegar antes porque no sabes cuánto te falta y puedes llegar al final muy fatigado. Durante la subida, vas a notar que los gemelos empiezan a percibir el sobreesfuerzo. Un truco muy sencillo y eficaz para darles un respiro a esos músculos es cambiar ligeramente la posición en la que apoyas el pie. Basta con ladearlo solo un poquito. De esta forma, empieza a trabajar otro grupo de músculos distinto y se reparte la carga del esfuerzo. Poco tardarás en notar un gran alivio de los músculos sobrecargados.

Otra cosa muy importante de la que va a depender que tengas mayor o menor sobrecarga es la sujeción de la mochila. Tiene que ir adaptada a la zona lumbar. Así no se carga todo el peso sobre los hombros. Y el agua siempre a mano. Parece una tontería, pero cuando llevas un ritmo bueno de caminata, es incómodo tener que interrumpirla para quitarte la mochila, coger la botella de agua y volver a retomar.

Beneficios de hacer senderismo

Una vez que te has preparado, has organizado tu ruta y todo lo que tienes que llevarte, solo te falta disfrutar de los beneficios saludables que te aporta hacer senderismo. Caminar por placer reduce el estrés y la ansiedad. Además, el hecho de estar dedicando tiempo a hacer ejercicio físico produce satisfacción ya que, a su vez, con ello tonificas los músculos de las piernas, nalgas y abdominales. De hecho, caminar al aire libre quema más calorías que una cinta de correr.

El contacto con la naturaleza hace que resetees la mente. Las largas caminatas respirando aire limpio afectan positivamente al organismo. Mucho más en las personas jóvenes a quienes se les refuerza el sistema de defensa natural y se agudiza la capacidad de termorregulación. Al exponerse a la radiación solar, promueve la producción de vitamina D con efectos positivos en los sistemas esquelético e inmunológico; por lo que se reduce el riesgo de contraer enfermedades típicas de los meses de frío.

Por lo que respecta al organismo, estimula la producción de glóbulos rojos, aportando más oxígeno a los músculos y mejora el rendimiento físico. A su vez, ayuda a reducir la presión arterial, la frecuencia cardíaca y los valores de colesterol. Por lo que contribuye, a reducir enfermedades cardiovasculares, la obesidad y sobrepeso, diabetes y osteoporosis, respectivamente.

¿Por qué deberías hacer el Camino de Santiago?

Debería ser obligatorio para todas las personas hacer el Camino de Santiago al menos una vez en su vida. El Camino de Santiago es más que recorrer diferentes sitios, en diferentes etapas para llegar a un destino.

Es un viaje interior, tienes mucho tiempo para conectar contigo, estar a solas contigo, pensar, meditar, resetear la cabeza y estar en el momento presente porque solo estáis el camino y tú. Aunque haya más gente, el Camino de Santiago es un viaje muy personal, de reencuentro contigo mismo, en el que cada uno lo vive de una manera. Tienes tiempo para escucharte, ver qué sientes, qué te duele, que te tranquiliza, qué te da miedo o qué te paraliza. Está demostrado que caminar durante varios días seguidos favorece la meditación.

Es todo un descubrimiento personal. Por eso, todo el mundo debería de hacer el Camino de Santiago una vez en su vida. ¿Sabías que caminar por placer está constituido como una actividad relajante y desestresante? Ese sería, de hecho, el primer y más importante beneficio psicológico de hacer el Camino: la reducción del estrés. ¿Estás preparado para empezar?

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